El nacimiento de un nuevo año

Que bonito y que malo puede ser recordar. Bucear por nuestra memoria, como peces buscando una perla. Un momento feliz. Comparar presente y pasado, ver si encajan, si estamos mejor o peor. O exactamente igual. Muchas veces ni siquiera es algo voluntario. Muchas veces es una imagen, un objeto, un sonido, un sabor... lo que nos empuja a recordar. Cosas buenas, cosas malas.  El cerebro no hace distinciones, el corazón sí.

Y es que hoy todo me recuerda a ti. A esa sonrisa especial que reservas para mí, al olor de tu pelo, a tus besos. Sentado en el andén de la estación no puedo dejar de pensar en el tren que me llevó hasta tu puerta. Estudio, pero pienso en tus exámenes en vez de en los míos. Me dicen "Mira que buena esta esa pava", y yo solo sacudo la cabeza, porque ninguna esta a tu altura. Feliz año nuevo, sí, pero feliz gracias a ti.

Así que, todos aquellos que habéis empezado mal el año, con disgustos, peleas y problemas, quiero que sepáis que nunca se sabe lo que traerá el futuro. El 2014 tampoco empezó bien para mi. No imaginé que acabaría donde estoy hoy. Un gran amigo dijo varias veces la misma mañana "El futuro es incierto compañero". Todos nos reímos, incluido él. Pero no podría estar más de acuerdo. Espero que el año que viene todos tengáis motivos para sonreír y podáis recordar miles de buenos momentos. Feliz 2015.

                         Pensamiento De Un Esperma