Hay que ser agradecido, es lo que le falta a este mundo. Basta de políticos ladrones, basta de cabrones que su única función sea joder y todo el que quiera, bienvenido es al grupo de los agradecidos, de los educados.
Un simple gesto que, a priori, puede parecer una tontería, para muchos puede ser una alegría. Y es que ¿A quién no le gusta que le agradezcan sus actos? ¿A quién no le gusta sentir que lo que hace es visto por alguien?
Sí te gusta que te den las gracias, empieza tú a darlas y verás como todos empiezan a dártelas. Por cierto, gracias por prestar un minuto de atención a este blog. Muchas gracias y, por favor, vuelve.

0 comentarios:
Publicar un comentario